viernes, 20 de septiembre de 2013
El caprichoso parón de selecciones ideado por la FIFA no es del todo malo, pues nos deja detalles, equipos e historias. Detalles y la ocasión de ver a muchas selecciones cuyas esperanzas para jugar el Mundial varían según el caso del que hablemos. Están las fijas, como España, Alemania o Argentina, las que sueñan, como Chile o Colombia, las que irrumpen, como es el caso de Bélgica, y luego están aquellas en las que brilló una estrella que nunca alcanzó una fase final. Es el caso de Gales, cuya selección ni disputará el Mundial ni ha tenido en ningún momento opciones de hacerlo. ¿La estrella? Gareth Bale se ha convertido en el hombre de moda y sí que nos gustaría verlo allá en Brasil, pero ni será posible ni estoy aquí para hablar del presente de los dragones.


Ryan Giggs con Gales
Creíais que venía aquí a hablar de Bale y no hay nada más lejos de la realidad. Ryan Joseph Wilson Giggs es el jugador por excelencia al que, por desgracia, nunca vimos en una fase final de Eurocopa o Mundial. Su larga y envidiable trayectoria le convierten en un mito en Manchester y verle capitaneando a Gales en una competición de tales características ya puede darse como causa perdida.

Ryan Giggs, quien debutara con el Manchester un 2 de marzo de 1991 en Old Trafford ante el Everton, ha jugado más de 1000 partidos con los diablos rojos y es el único jugador que ha logrado marcar en todas las temporadas disputadas de Premier League.

Giggs capitaneó en su juventud a los escolares de Inglaterra y se le propuso jugar con la selección inglesa pero, fiel al país que le vio nacer, Ryan escogió Gales. Tras su debut con los dragones, pocos fueron los partidos internacionales que pudo disputar pues su entrenador en Manchester, Sir Alex Ferguson, se negó a dejarle ir para partidos amistosos. Desde que debutara en 1991 y hasta que dejara la selección en 2007, Giggs jugó sesenta y cuatro partidos y logró marcar doce goles.

Con pocos records por batir y 38 años, la participación de Giggs en un campeonato internacional se hizo posible gracias a los JJOO de Londres 2012. Pearce, seleccionador británico de aquella selección formada expresamente para los Juegos Olímpicos, nombró a Giggs capitán de aquella escuadra y, por fin, pudimos verle -capitaneando a la selección de Gran Bretaña- en un campeonato internacional. No solo jugó aquella fase final, sino que logró nuevos records difíciles de superar. Giggs se convirtió en el jugador más veterano en participar en unos JJOO con 38 años y 243 días y no quedó ahí la cosa, pues tres días más tarde logró marcar ante los Emiratos Árabes Unidos, convirtiéndose así en el más longevo en conseguir un tanto en cita Olímpica.


Siempre será la espinita de Giggs jugar con su Gales natal. Pudo resarcirse en los Juegos y, aunque no es comparable a un Mundial o Eurocopa, pocos son los retos que a Ryan Giggs le quedan por superar. Un jugador extraordinario con una carrera para enmarcar que tuvo la suerte de nacer en un país para el cual, modestamente, se convirtió en mito. 

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Artículo por @futopis

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