lunes, 23 de septiembre de 2013
Lafita metió el miedo a los blancos en el 4’. Cristiano, con un doblete, Pepe e Isco hicieron los goles. Gran partido de los de Ancelotti, en especial de Illarramendi. Lesión de Bale en el calentamiento. El Getafe muy gris.

Once del Madrid
El Bernabéu recibía hoy a sus jugadores tras la exhibición del pasado miércoles en Estambul. Pero éste no era un partido cualquiera, el fichaje de los 100 millones era titular, esta vez ante su público, en su estadio. La expectación era máxima, la parroquia blanca estaba ansiosa de verle galopar por la banda, y lo hizo, aunque únicamente en el calentamiento, Bale caía lesionado y el Bernabéu se veía obligado a aplazar la cita para otro momento.


El que no faltó a su cita con este estadio fue Ángel Lafita. El de Zaragoza adelantaba a los azulones en el minuto 4 – tras tocar su disparo en Pepe y engañar a Diego López – convirtiendo al Real Madrid en el equipo al que más goles ha marcado en su carrera (4). Pronto marcó el Getafe, pronto reaccionó el Madrid. Los blancos se acordaron que se estaban diisputando tres puntos vitales y más después del pinchazo de la pasada jornada con el Villarreal.

El conjunto de Ancelotti no se volvió loco, ni recurrió a la contra que al italiano no disgusta. Con Illarramendi a los mandos se vió un Madrid diferente. Con un juego pausado y eficaz, con mucho movimiento entre líneas y una circulación fluida el Real Madrid consiguió el mando del partido. Dominó a su vecino descarado y le tranquilizó hasta casi anestesiarle. El de Mutriku fue clave en todo el partido, pero aún más en este momento. Tras unos minutos “de pretemporada” en Estambul hoy Ancelotti le puso un examen sorpresa otorgándole la batuta madridista, y no defraudó. La virtud de un centrocampista en hacer que las cosas parezcan fáciles, en eso Illarra es único. Sostuvo al equipo y le dio lo que necesitaba en cada momento del partido, dando esa pausa que siempre es necesaria y que pocas veces es vista en este equipo.

Once del Getafe
El Madrid trabajó el empate, y llegó en el 18. Pepe se encargaba de empujar el balón a la red tras un primer remate fallido de Cristiano. Di María la puso y el Getafe hizo el resto. Luis García tiene trabajo con este equipo, convirtió en virtud el mayor defecto madridista, el balón parado. Una y otra vez el conjunto blanco sacaba provecho de la estrategia y una y otra vez el conjunto azulón desperdiciaba estas situaciones. Muy flojitos por arriba, atacando y defendiendo.

Las faltas son para Cristiano, no marcó, pero provocó un penalti. El portugués estrelló un libre directo en la barrera, en las manos de Míchel concretamente, Fernández Borbalán no dudó. Penalti. El portugués se frotaba las manos, Moyá temblaba. 2-1. La segunda parte fue un paseo, Isco aprovechó una jugada de pillo de Cristiano Ronaldo para alargar su idilio con el Bernabéu. Cuatro partidos en su nueva casa, cinco goles.
El Getafe no se encontró en ningún momento, Sarabia lo intentaba, Diego paraba – algo normal viendo el nivel del gallego – y Cristiano remataba de tacón en el 92 demostrando que es insaciable.

Genial Di María.
El argentino fue clave en la victoria, como cada domingo, “El Fideo” se puso el mono de trabajo y mantuvo a su equipo fuerte en todo momento, en especial en este segundo tiempo. La presión asfixiante es su consigna dentro del campo, trabajo y esfuerzo sus máximas dentro de este deporte, las mismas que le han permitido no sólo quedarse en el Real Madrid, sino que además le han hecho ganarse un puesto.

El taconazo de Ronaldo
 El que lo mantiene por inercia es Benzema. La ausencia de Higuaín y la inexperiencia de Morata hacen que Karim tenga un puesto asegurado, quizás por eso no se termina de ver al buen Benzema. Sus número son geniales, aunque los números no siempre hablan por sí sólos. La influencia de Benzema en el juego es muy pobre y salvo en Estambul, haces muchas más cosas mal que bien. El Bernabéu quiere currantes, quiere “Fideos” y el galo es demasiado frío, exquisito técnicamente, pero muy frío y cuando las cosas no salen, esa frialdad se paga. Aunque Arbeloa evitó que el estadio cobrase ese pago y levantó a la grada pidiendo aplausos al francés reconociendo su trabajo, todo sea dicho, hoy trabajó, a ráfagas, pero trabajó.

El Madrid ganó, también reservó y sobre todo gustó. Ancelotti busca un equilibrio entre pegada y dominio táctico, quiere que su equipo sepa jugar y tenga tablas y oficio para salir de cualquier situación, así sí Carlo, así sí.

CAMBIOS:
RMA: 
77’ Sale Illarramendi, entra Luka Modric.
80’ Sale Benzema, entra Morata.
85’ Sale Isco, entra Jesé.
GETAFE:
45’+ Sale Lafita, entra Sarabia.
46’ Sale Escudero, entra Roberto Lago.

71’ Sale Arroyo entra Rafa.

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Artículo por @vivi10bkk

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