lunes, 9 de septiembre de 2013
Tokio 2020.
Se nos olvida que además de España, país castigado por la economía, teníamos otros competidores altamente duros.
Uno nos lleva 100 años de adelanto en nivel de vida, tecnología y empleo. El otro (Estambul) es historia pura y atractivo para el turismo.
No me vale la excusa de atizarle al COI o decir que nos tienen manía, no señor. El varapalo de Madrid era algo que podía suceder y de hecho era muy posible ante la mala información que se nos dio, generándonos ilusiones de ganadores antes de saber el resultado de la votación.
Seamos claros hablando: con semejante crisis, políticos que no nos representan y no saben hablar inglés correctamente era muy complicado llevarse unas olimpiadas.
Si a ello le sumamos la Operación Puerto, con decenas de bolsas de sangre y deportistas bajo la sospecha del dopaje, era evidente que teníamos todas las de perder.
No me alegro de la derrota por los madrileños en sí, sino por los vividores que pretendían sacar tajada de todo esto cuando el resto del año no hacen nada por mejorar la situación del país.


Finlandia-España y tema Casillas.
Del Bosque puede decidirse por quien quiera, está claro, pero sinceramente si un seleccionador elige a quien mejor cree que está, debería haber puesto a Valdés y no a Iker por su buena relación personal.
Ambos son dos grandes porteros, pero uno lleva varios Zamoras acumulados y ha sido clave contra el Atlético en la Supercopa. El otro pasa por un momento duro en su competencia con Diego López.
Más allá de esto, el partido fue bien planteado, con Koke y Villa abriendo campo por las bandas y sufriendo en alguna pérdida de balón que rápidamente Finlandia trataba de dar a Pukki para la contra.
Con el 0-1, quisieron ser valientes adelantando líneas y lo pagaron caro. Jesús Navas entró en el momento necesario.


Cristiano.
Portugal caía 2-1 en el minuto 60 contra Irlanda del Norte y con uno menos por expulsión absurda de Postiga... hasta que apareció él. Tremenda su capacidad goleadora, así como el golpeo en el libre directo del 2-4.
Tengo partidos de Eusebio en aquel Benfica de los 70 y, creedme, no tiene nada que envidiarle. Potencia, pegada, remate por arriba y mucha calidad para tirar de un equipo entero.

Colombia.
Ganó cómodamente a Ecuador, pero no se gustó como otras veces. Esperaba más de Teo Gutiérrez, que estuvo algo apagado aunque lo intentó, y Falcao cuando se alejaba del área no aparecía -como buen 9 puro que es-.
Lo mejor de esta selección sigue siendo sus dos puñales: Armero y Zúñiga, cada uno entrando por una banda constantemente.
Bien Valencia, el mejor con diferencia de Ecuador. Trató de tirar del carro en momentos puntuales.

Gary Medel.
Soberbio su partido contra Venezuela jugando de central. Tuve dudas en su momento cuando Sampaoli comenzó a ponerle ahí, pero corta y saca la pelota jugada como nadie. Otro caso exitoso de reconversión como Mascherano en el Barça.
Chile se comió a la vinotinto, fue superior en todo momento con Vidal libre de movimientos y Alexis aunque no marcó se le vio suelto y con mucha confianza. Tata Martino está siendo clave en eso.


Uruguay y la importancia de Suárez-Cavani.
Me da pena por Perú que tenga pie y medio fuera del mundial. Tocaron techo en la pasada Copa América, pero lo que tiene la celeste arriba solo te asegura éxito.
Más allá de los eternos problemas en la salida de balón, de sobra conocidos por los charruas, Cavani hizo trabajo doble bajando a recuperar y subiendo la pelota. Del resto se encargó Suárez, desquiciando a todos a la contra y provocando una expulsión.

Italia.
Ganó sufriendo 1-0 a Bulgaria, cayó resumido, pero dio cierta sensación de que Prandelli comienza a buscar un estilo diferente con 9 más de área. Ahí es donde Gilardino le gana la partida a hombres como El Shaarawy, Balotelli y Cassano, quienes antes parecían indiscutibles y dicho sea: ninguno era delantero puro.
Gran Buffon. Sacó una a bocajarro.

Vassiljev y su recital contra Holanda.
Mediocampista estonio con llegada que juega en el Amkar Perm ruso. Totalmente desconocido, pero a sus 29 años se salió llegando desde segunda línea y fue el héroe del 2-2 ante su afición local.
Van Gaal, fiel a su estilo, sacó un once plagado de jóvenes que juegan en la Eredivisie y se la pegó. Muchos de ellos no niego que tengan calidad, pero solo Strootman, Robben, Sneijder y Van Persie dan la talla a nivel internacional para encuentros duros donde te juegas algo.


Brasil de Scolari.
El amistoso contra Australia de este Domingo sirvió para probar cambios en el once de inicio: metió a Ramires por Oscar, Maicon -que va resucitando- por Alves y arriba Bernard y Jo por Hulk y Fred.
El experimento de Ramires funcionó: aportaba menos toque que Oscar, pero más salida rápida de balón, y sobretodo mucho recorrido.
Cierto que Australia no fue rival, le pasaron por encima con un cómodo 6-0, pero me gustaron los detalles de Bernard por la derecha y el completo partido de Luiz Gustavo enmedio cubriendo las subidas de Paulinho y Ramires. Hasta se atrevió llegando al área para hacer un golazo cruzándola por alto.
Ante todo esto, es evidente que Brasil ya no es la de Joga Bonito que nos vendían, pero me gusta este estilo de Scolari con mediocentros currantes y alternando llegadas desde atrás.


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Artículo por @fran_navarr0

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