lunes, 15 de abril de 2013

En este artículo no pienso hablar de los avances que ha tenido el fútbol en estos años. No voy a hablar de falso 9 o de las distintas variantes que se están imponiendo en este fútbol de hoy. Voy a hablar de la parte mala y negativa del nuevo orden del fútbol. Política, periodismo basura, intereses económicos, equipos a golpe de talonario… Aquí va mi visión sobre esto.

Claro uso político del fútbol
Política. Un término muy despreciado en estos días. No entraremos al trapo sobre las cosas acertadas o no acertadas que están realizando nuestros supuestos ‘’líderes’’ y ‘’representantes’’ sino de la mezcla de este término con el fútbol. Para mi la política no tiene cabida en el fútbol. Usar este deporte como modo de difundir ideas o doctrinas me parece deplorable ya que adultera el espíritu del juego. Las incontables declaraciones de los directivos del Barça sobre la independencia de Cataluña o el lavado de imagen que intentan ciertos regímenes (como el de Guinea Ecuatorial) me parecen bastante lamentable

Por contrario si que veo positiva la implicación de ciertos jugadores en proyectos de ayuda al tercer mundo o gente que necesita ayuda. Al menos yo cuando veo fútbol quiero ver solo deporte, no quiero que este o el otro me intenten decir que tengo que pensar o hacer. Por ejemplo, ahora se relacionado al Barça con independentismo catalán, ¿pero que pasa con los que detestan esta idea pero apoyan al equipo? ¿Quedan apartados?


Un desinformativo de deportes
Periodismo basura. Podría escribir un libro sobre esto pero intentaré ser lo más preciso posible para resumir. Para mi periodismo basura es todo aquel que va dirigido a desestabilizar, desinformar, inculcar una idea o simplemente que no aporta nada. De acuerdo a esta descripción muchísimos periodistas quedan encuadrados en el periodismo basura. Últimamente la ‘’moda’’ entre estos especímenes es marcar a un jugador/entrenador y machacarlo hasta no poder más independiente de lo que haga o deje de hacer. Aquí  por ejemplo tenemos el caso de Mourinho, siempre acusado de que se guía por amiguismos y que hay ciertos jugadores que jugaban por decreto independiente de cómo jugasen. Ahora está recibiendo muchos palos por sentar a Casillas, que no estaba teniendo su mejor temporada. 

Hay que decir que existían rencillas personales y además es el capitán del Madrid, por lo que Mourinho podría ser criticado con razón, aunque en defensa del portugués hay que decir Casillas estaba en mala forma forma y que la mayor parte de críticas provienen de que el de Móstoles era uno de ‘’amigos de la prensa’’ y porque simplemente queda mejor defender a Iker antes que al portugués. También se merece una mención todos esos artículos de Marca en los que trataba temas banales y por supuesto Tomás Roncero, con su madridismo absurdo.

Dimitri Piterman (49)
¿Intereses económicos? Aquí podemos meter una gran cantidad de equipos que bajo promesas de estabilidad económica vendieron sus proyectos a la gente que no debe. Aquí tenemos a Alavés (Piterman) o Racing (toda la serie de dueños o gestores ladrones que han tenido estos años). Equipos históricos han estado al borde de la desaparición porque han sido solo una forma de enriquecimiento personal y no simplemente una entidad deportiva. En estos tiempos el dinero fácil es tentador y esto provoca que equipos que son acuciados por las deudas recurran a gente no muy de fiar para que aparentemente pueden ser la solución a todos los problemas. La necesidad de dinero no solo ha provocado decisiones erróneas en los equipos de fútbol sino también en la prensa, ya que algunos medidos han pasado a simplemente tratar temas polémicos y a ser muy parciales con objeto de conseguir ser más nombrados, y de esta manera conseguir más dinero.

Mohamed Al- Fayed, pionero en esto
En el tema económico ha aparecido un nuevo fenómeno que está cambiando el fútbol como son los equipos realizados a base de dinero y solo dinero. Se podría decir que el primer equipo realizado de esta manera con cierta influencia en el fútbol fue el Chelsea, pero antes de eso el Fulham ya estaba dirigida por la familia Al- Fayed (dueña entre otros negocios de Harrods). A partir de ahí muchos equipos han sido comprados por gente millonaria. Así tenemos al Anzhi, Manchester City, PSG… Equipos que sin la ayuda del dinero estaban en media tabla sin pena ni gloria. Esto no estaría mal si no llega a ser por la diferencia que genera con otros rivales y porque se crean conjuntos de jugadores (que no equipos muchas veces) artificiales que solo tienen en común que buscaban un gran pelotazo. Además, no siempre sale bien. El Málaga ha pasado esta temporada penurias económicas a pesar de haber vendido a algunas de sus estrellas como son Cazorla o Rondón.

El fútbol debe ser fútbol. Solo eso, es solo un deporte, no hay que mezclarlo con otras cosas. Obviamente necesita financiación pero a veces el precio de la estabilidad es muy alto y se confía en quién no se tiene que confiar. ¿No al fútbol moderno? Para nada. No al circo alrededor del fútbol moderno.

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