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El Inter de Milan se ha metido en un marrón del que le va a costar salir. El conjunto “neroazzurro”, a falta de dos jornadas para el final, está situado en séptima posición, por detrás de Roma y Lazio, que, en función de lo que hagan en la final de copa, pueden ayudar a que éste entre en Europa League.

Con un inicio impresionante, el equipo dirigido por Andrea Stramaccioni se ha ido deshinchando con el paso de las jornadas. Empezó su andadura en liga con registros que superaban con creces las expectativas. Decimos esto porque la afición y el club ya esperaban una temporada discreta, por la plantilla, básicamente. Pero a lo que íbamos. Logró una racha de victorias importante antes de visitar a la Juve. Fueron a Turín y salieron vencedores (1-3), que generó ilusión. Pero es que antes ya habían ganado al eterno rival (0-1), con lo que salieron muy reforzados. Y, por si fuera poco, pocas jornadas más tarde, consiguieron una importantísima victoria frente al Nápoles en casa (2-1), lo que confirmaba el buen estado del equipo. 

Sin embargo, fue perder en el partido siguiente frente la Lazio (1-0), y los malos resultados llegaron solos. Cogieron una dinámica más negativa que positiva, pero sobre todo irregular, que está siendo el resumen de la temporada. Se juntó todo. Un cúmulo de despropósitos. Wesley Sneijder, uno de los pesos pesados, salió rumbo a Turquía, Zanetti se lesionó y, con él, una plaga de lesiones que provocaron que los delanteros tuvieran que ejercer de mediocentros.

Se bajó del cielo al suelo de golpe. Ni en la Europa League consiguieron pasar, aunque cayeran contra otros de los candidatos, el Tottenham. Tampoco colaboró la gestión del presidente Moratti, que tras vender a jugadores como Eto’o, Sneijder, Maicon, Júlio César…, o al mismo Mourinho, se esperaba que hiciera alguna gran inversión, pero no fue capaz de traer ninguna estrella que generara un poco de ilusión.

Las lesiones, la mala gestión, incluso la sensación de no estar en Champions después de estarlo en tantas temporadas anteriores, son algunos de los factores que han echado el equipo abajo. Pero es que el dinero que se ganó con esas salidas, se gastaron en jugadores que no están a la altura de un equipo como el Inter, como son Silvestre, Gargano, Álvaro Pereira, Antonio Cassano…

Teniendo en cuenta los antecedentes, el Inter ha pegado un bajón muy preocupante. Solo han pasado 3 años desde que se consiguiera esa Champions League que no se lograba de hacía 50 años, aproximadamente. 

Ahora, salvo milagro, es una incógnita el futuro del equipo. Si no consiguen entrar a Europa, los ingresos serán aún menores, por no decir inexistentes. Suerte va a tener si consigue mantener a sus jugadores actuales. Además, el eterno rival está empezando a mirar para arriba. El Milan, poco a poco, se está reforzando con jugadores jóvenes y mucha progresión, y, de vez en cuando, incorporando alguna estrella, como es el caso de Balotelli.

El caso es que, con un presente alarmante, el futuro se presenta aún peor. Es una lástima que esos equipos que, hasta hace nada, estaban en lo más alto del fútbol europeo, ahora las estén pasando canutas por el dinero. La economía ha afectado muy seriamente al espectáculo. Equipos como el Liverpool, Arsenal, Olympique de Lyon, el propio Milan…, están más pendientes de solventar sus deudas que de conseguir éxitos.

Artículo por @XescRipoll