sábado, 16 de febrero de 2013
Argentina, solo por contar con Messi en sus filas, es una de las favoritas a alzarse con la Copa del Mundo. Todas las miradas están puestas en el astro argentino y en el título que terminaría de consagrarle como el mejor futbolista de la Historia. Pero a esto juegan 11, y necesitará del buen hacer de otros diez juegadores para tan ansiado objetivo. A continuación analizaremos el que, en mi opinión, podría ser el mejor 11 para Argentina (que seguramente tenga poco o nada que ver con lo que veremos en 2014 o con lo que estamos viendo en los últimos partidos):


Portero:

Willy Caballero (32)
Willy Caballero: a decir verdad, cuando el Málaga entró en Champions pensé que Caballero se les quedaba corto. Estaba totalmente equivocado. El ex del Elche entre otros ha demostrado este año más seguridad que nunca. Bien por alto, excelente en el mano a mano, grandes reflejos. Llegaría al Mundial con 34 años, buena edad aún para defender la meta. Es el portero argentino que juega a mayor nivel, no hay ningún otro que participe en Champions. Por eso sorprende tanto que no sea ni convocado. Desde luego sería mi elección para el arco albiceleste antes que el actual titular, el joven Romero.

Defensas:

Nicolás Otamendi (25)
Otamendi: central del Oporto. Buena salida de balón, ya fue pretendido por Pellegrini para el Málaga y el alto coste de la operación frustró su fichaje. 25 años. Gran colocación y anticipación. Defensa muy completo. Injustamente criticado en Argentina tras el 0-4 que les endosó Alemania en el Mundial. Si es cierto que estuvo muy desafortunado, pero un partido no debería condenar al ostracismo a uno de los mejores defensores con los que cuenta la celeste a día de hoy. En Champions con el Oporto puede tener el escaparate perfecto para revindicarse y volver a vestir la elástica internacional.

H. Armando Campagnaro (32)
Campagnaro: una lástima lo del central del Nápoles, claro caso de jugador que despunta demasiado tarde. 32 años ahora, el Mundial le va a pillar con 34. Viendo la juventud del resto de centrales, Argentina necesita a alguien “curtido en mil batallas” para aportar seriedad, carácter y orden en la zaga. Solo 8 internacionalidades, con la ilusión de un debutante. Con el Nápoles ha demostrado su seguridad atrás. La única duda que ofrece es el estado físico al que pueda llegar a la cita de Río.

Ezequiel Garay (24)
Garay: con a penas 20 años ya destacaba en el Racing de Santander. Quizá su paso por el Madrid frenó su progresión, pero ha recuperado esos dos años perdidos  jugando en el Benfica. Se ha ganado un puesto en el 11 del conjunto portugués. Contundente por alto, va bien al cruce. A pesar de su constitución (1’92) es bastante rápido. Como curiosidad, y aunque no es su función, en su etapa en el Racing ofrecía unos grandes registros goleadores: 14 tantos en 82 encuentros, números muy elevados para un central. El Manchester United se ha interesado por él para ser el relevo de Ferdinand. El Mundial le puede llegar en el mejor momento de su carrera.

Centrocampistas:

Lucas Biglia (26)
Biglia: centrocampista del Anderlecht, ya ha entrado en las últimas convocatorias. Mediocentro de contención, no tiene problemas para jugar el balón. Todo esto en la liga belga, quedan las dudas de su rendimiento ante rivales con mayor entidad. Junto con Mascherano podría formar un doble pivote de garantías que compensase el hecho de apostar por tres centrales. Viendo que su función la ha llevado Gago en otras ocasiones, creo que la mejora sería exponencial. Fichar por una liga más prestigiosa la próxima temporada le puede ayudar de cara a estar más preparado para el Mundial del 2014.

Éver Banega (24)
Banega: nunca he sido especial admirador de Banega. Pero es lo más parecido que tiene Argentina a un mediocentro creador de garantías. La calidad lo tiene, pero no la cabeza. Debe centrarse. Tanto en el campo (tan pronto hace el partido de su vida contra el Barça como se borrra contra el PSG) como fuera de él (su famosa “cámara indiscreta”, alcoholismo, el accidente con su coche…) Muchas de las opciones de Argentina pueden pasar por sacar lo máximo del jugador del Valencia. En el país de los ciegos, el tuerto es el rey. Solo hay que ver que la alternativa a él podría ser Gago…

Erik Lamela (20)
Erik Lamela: en la Roma juega más adelantado, más de mediapunta. ¿El problema? Argentina arriba va sobrada, su talento en la creación hace falta más que su último pase y su regate. Lamela tendrá que reciclarse y aprovechar sus virtudes más cerca del medio campo que de la línea de tres cuartos. Después de Messi, debe ser el jugador con menos responsabilidad defensiva. Biglia, Mascherano y Banega deben corregir lo poco que aporta en defensa y darle “licencia” para las funciones más constructivas. Aún es joven, quizá este Mundial le vaya a pillar demasiado pronto (tendrá 22 años) pero puede ser su momento ante la falta de competencia para hacer lo que él hace.

Javier Mascherano (28)
Mascherano: vital en este esquema de juego, por su polivalencia. En partidos más controlados puede jugar en mediocampo. Si es necesario defender un resultado o corregir en defensa puede ser un central más. Acostumbrado al juego del Barça, puede juntarse con los centrales para ayudar a salir con el balón jugado. No es Piqué en ese sentido, pero puede contribuir a esa función. Si se juega sin laterales, puede ser una ayuda para cerrar huecos en las bandas. Lo dicho, pieza clave y capaz de desarrollar múltiples funciones atendiendo a lo que demande el partido.

Delanteros:

Leo Messi (25)
Messi: la presencia de Messi arriba parece innegociable. Pero eso dependerá del funcionamiento del medio campo de la albiceleste. En Suecia Ibrahimovic baja a medio campo a participar porque es el jugador con más calidad del equipo. Puede que Messi tenga que hacer ese sacrificio si no le llegan balones arriba. En principio Messi debe jugar de Messi, como siempre, y aportar calidad arriba como solo él sabe hacer. Pero las dudas en la medular argentina pueden obligarle a jugar más de “Iniesta”. Además, si algo tiene Argentina es delanteros. La ausencia de “La Pulga” se puede compensar arriba, pero puede ser insalvable abajo.

Gonzalo Higuaín (25)
 Higuaín: ¿por qué Higuaín? La realidad es que Higuaín ha cumplido siempre que se le ha dado la oportunidad. Anotando en la mayoría de partidos. No se ha arrugado por tener que competir con Agüero y compañía por un puesto en el 11 y siempre ha respondido. Es uno de los mejores delanteros al desmarque, y eso es algo que bien puede aprovechar el combinado celeste, con la prodigiosa visión de juego de Messi, Erik Lamela o Di María. Además hay que sumar su trabajo defensivo, siendo el primero en presionar la salida de balón rival. A Higuaín se le pueden discutir muchas cosas, pero el sacrificio no es una de ellas.

Ángel Di María (25)
 Di María: el jugador del Madrid está en estos momentos en un bajo nivel de forma (al margen del partido contra el Manchester United del otro día). Sin duda Agüero o Lavezzi le ganarían la partida en estos momentos. Pero mucho ojo con “el fideo” si llega bien. Se entiende con Higuaín, es una conexión que el técnico argentino puede aprovechar. Di María a plena forma se parte el alma presionando, igual que Higuaín. Ellos podrían presionar arriba y dejar a Messi totalmente libre de labores defensivas, manteniéndolo fresco para lo que de verdad se le necesita. También es una alternativa más para ayudar en la creación si el partido se atasca. Incluso (en casos de emergencia) puede jugar de lateral como ya hizo en algún partido con el Benfica.

Suplentes:

Sergio "Kun" Agüero (
Agüero: más calidad arriba que la que puede aportar Higuaín. Es capaz de decidir un partido él solo en detalles individuales. El primer cambio en Argentina si el partido se pone cuesta arriba. Mejor que Higuaín para jugar en partidos donde no haya muchos espacios. Mucha movilidad, puede crear huecos para Messi. Más combinativo. Salvo Messi (intocable) le puede pelear el puesto sin problemas a Higuaín y Di María.


Ezequiel Lavezzi (27)
Lavezzi: mucha potencia y garra arriba. Gran disparo. Tanto en el Nápoles como en el PSG ha caído a banda. Físicamente muy superior a Di María. Mucho desborde, perfecto para aprovechar el cansancio de los defensas si sale como revulsivo. En principio sería el recambio de Di María. Se piede último pase y calidad, se gana en definición, desborde y sacrificio.

Juan Román Riquelme (34)
¿Riquelme?: ha vuelto a Boca. La lógica hace pensar que después de haberse retirado y con su edad (tendría 35 para el Mundial) es imposible su presencia. También tuvo problemas con Maradona en su última etapa en la albiceleste. Pero Palermo ya acudió al último mundial con 37 años a sus espaldas. Si físicamente está para 15-20 minutos buenos, no sería una mala opción. La visión de juego dudo que la pierda nunca, y de eso no andan sobrados en este equipo. Sería raro, pero no imposible.

Javier Pastore (23)
Pastore: ¿que hacemos contigo? En el PSG está siendo duramente criticado por su bajo rendimiento. Pero si jugase siempre como contra el Valencia, no tendría problemas en hacerse un hueco en el 11. En ese sentido, caso similar a Banega, mucha calidad para tan poca cabeza. Tiene un gran último pase, buen disparo y en Mestalla sumó a todo eso una gran capacidad para el sacrificio defensivo. Las dudas son las de siempre: ¿jugaremos con un crack más o con un hombre menos? Tiene hasta el Mundial para ganar en concentración, mentalidad y regularidad en su juego.

Fabricio Coloccini (31)
Coloccini: experiencia para la zaga celeste. De sobra conocido, viendo la juventud de Fernández y Garay y la escasa experiencia internacional de Capagnaro, no sería de extrañar que fuese titular. Muy seguro (al margen de algunas cantadas puntuales en su carrera), es una garantia tenerlo, tanto en el 11 como suplente de confianza.

Pablo Zabaleta (27)
Zabaleta: sería la alternativa si se apuesta por jugar con laterales. Particularmente nunca ha sido de mi agrado, pero reconozco que está rindiendo a buen nivel tanto en la Selección como en el Manchester City. Esperaba bastante menos de él y en ese sentido me ha sorprendido bastante.

Federico Fernández (23)
Federico Fernández: solo 23 años, central del futuro para Argentina. El Nápoles lo ha cedido en este mercado de invierno al Getafe. Curioso que haya acabado en el conjunto azulón hasta final de temporada, cuando hasta el Real Madrid se interesó por él. El jugador quiere ser titular indiscutible para ganarse su billete al Mundial. Al igual que Garay, es un portento en el juego aéreo. Buena colocación y anticipación. 16 veces internacional, mucha experiencia para su juventud. Ex compañero de Campagnaro, jugar con los dos en la zaga facilitaría el entendimiento en defensa.

Sergio Romero (25)
Romero: elevada estatura (1`88), bien en los balones aéreos.  Competente, actualmente es el portero de la Sampdoria. Con toda seguridad será el meta titular en el Mundial (por mucho que nosotros veamos a Willy Caballero como el más indicado). La juventud es su principal virtud, con 25 años tiene margen de mejora. Se espera que sea el portero del presente y del futuro de Argentina.

No nos pararemos a analizar más, pero baste decir que no nos hemos detenido en jugadores como Tévez, lo que da una idea del potencial de la escuadra argentina.

¿Cómo jugaría esta Argentina?

Reconozco que la idea de jugar con tres centrales  en una especie de 3-4-3 puede parecer muy romántica o “de jugar al FIFA” en principio. Tiene su explicación. Si Argentina sufre atrás, Mascherano puede retrasar su posición y pasar a jugar con un 4-3-3. Incluso si el equipo sufre por bandas, Di María puede reciclarse a lateral y Biglia y Mascherano ayudar a tapar los huecos. Con el sacrificio defensivo de Biglia y Mascherano (y Di María en caso de emergencia) Argentina no tendría por qué sufrir atrás.
Otamendi sería responsable de sacar el balón. En caso de dificultades ante equipos que presionen muy arriba, Mascherano retrasaría metros para ayudar en esa función.

En mediocampo, Mascherano y Biglia desempeñarían labores de recuperación, pero sus características les permiten jugar el balón. Sin alardes. Pero son más que un par de mediocentros defensivos. Banega sería el jefe de la “sala de máquinas”. Esta posición es la que me ofrece más dudas por la irregularidad de Banega, pero Argentina no tiene demasiadas alternativas. Si está al 100% está bastante por encima de cualquier otra opción como mediocentro. Además es su posición natural, no es un mediapunta reconvertido. Erik Lamela jugaría un poco más adelantado en el dibujo, siendo el enlace entre el mediocampo y los tres de arriba. Si se pasa a jugar con 4 defensas, hablaríamos de un 4-2-3-1, con Biglia y Banega de mediocentros y Lamela en el centro de la línea de mediapuntas, con Higuaín como hombre más adelantado. En cualquier caso Lamela estaría prácticamente exento de labores defensivas.

Arriba, Messi con total libertad, tanto para encarar como para meter pases entre líneas. Sin trabajo en defensa. Esa sería la idea inicial. Si el mediocentro celeste no funciona, Messi bajaría a mediocampo a recibir y se pasaría a jugar con una especie de 3-5-2. Si Di María tuviese que pasar a carrilero por demandas defensivas, se jugaría con un 4-4-2 improvisado. Higuaín sería la referencia fija arriba.

En definitiva, no hablamos de un dibujo fijo, si no de 11 jugadores que pueden adaptarse a distintos esquemas, donde es clave la calidad de Messi y la polivalencia de Mascherano. Por no hablar del arsenal de recursos de los que dispone en el banquillo. Por equipo, Argentina no debe salir a mantener un resultado o a especular. Tiene dinamita arriba, y debe ganar los partidos más por meter más goles que el contrario que por recibir menos. Por eso la idea de jugar con 3 centrales, menos arriesgada de lo que parece en un principio y que permite aprovechar mejor la calidad que tiene Argentina de mitad de campo para adelante.

Que conste que esto es mi idea de cómo puede aprovechar Argentina sus virtudes y disimular sus defectos. Ni mucho menos es una predicción de cómo jugarán en el Mundial, porque creo que no tendrá absolutamente nada que ver. Veo imposible que apuesten por una línea de tres por mucho Mascherano y Biglia que tengan delante. Tampoco creo que se apueste por Erik Lamela, menos aún cuando Gago es uno de los “enchufados” de la selección. Mucho más posible veo el tridente Messi-Higuaín-Di María, pero con la calidad que hay arriba, solo el astro del Barça tiene garantizado su sitio. Salvo sorpresa, también dudo muchísimo que veamos a Caballero si quiera convocado.
Por todas estas variables, Argentina me parece una de las selecciones más atractivas a seguir en Brasil 2014.

Esperamos que os haya gustado el artículo, muchas gracias por leernos y podeis seguirnos en nuestra cuenta de Twitter @falso9blog.

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