Falso9blog

Venia Italia de dominar sus partidos, de tener en Verratti (su medio centro organizador) el mejor de los suyos, de solo encajar 1 gol en todo el campeonato (de penalti) y de no verse claramente superado en ninguno de los partidos…hasta que se encontró con España.

Comenzaba el partido al igual que lo suelen empezar Italia y España, presionando arriba y tocando, solo que esta vez Italia asumió que no podía hacer eso y le dejo la pelota a España quien tocaba y presionaba arriba. Así comenzamos el choque, tocando y moviendo el balón, hasta que agarró el balón Isco escorado en la izquierda, Morata abandonó su posición de 9 y fue a apoyarle, recibió el balón, se giró, se fue en velocidad de quien tenía al lado y al llegar a línea de fondo levanta la cabeza y ve a Thiago que llega desde segunda línea, se la pone y el capitán solo tiene que empujarla. 1-0.

A raíz del gol Italia se sobrepone un poco y busca las espaladas de la defensa española, en una de esas Rossi le mete un pase largo a Inmobile que le gana la espalda a Íñigo Martínez y bate a De Gea con una vaselina preciosa.

Tras el gol España vuelve a hacerse con el control del partido, hasta que Koke recibe en estático escorado levemente a la izquierda, levanta la cabeza y le mete un balón preciso a Thiago que se ha metido entre los dos centrales, estos fallan (uno muy por detrás y el otro muy por delante de Thiago) le llega el balón a Thiago que controla y hace el 2-1.

Seguía España con el control del partido y entrando con mucho peligro por la izquierda, en la que se asociaban Alberto Moreno, Isco, Tello y Morata en algunas ocasiones. Fue por ahí por donde entró Tello como una moto, frenó y volvió a arrancar, el defensa no frenó y arrolló al extremo haciendo penalti. Thiago, por el centro y fuerte marca su tercer tanto y el 3-1.

Así acababa la primera parte. 45 minutos perfectos de Thiago y el 3-1 en el marcador. La segunda parte baja un poco en intensidad y en ocasiones. Los italianos no quieren arriesgar y España se dedica a mantener la posesión. Esta vez la banda más atacada y por la que España crea más peligro es la derecha, por ahí Montoya no para de subir y hacer 2vs1 junto a Tello al defensa italiano que no recibía la ayuda de Insigne.

Montoya vuelve a ganar otra vez su banda, recibe de Koke dentro del área, recorta y Regini lo barre clarísimamente, penalti que transforma Isco en el 4-1. Este gol hace que Italia se dé por vencida y España siga manteniendo el ritmo bajo de partido. Pese a ello marca Borini de disparo ajustado, raso y a la derecha de De Gea tras pared con Insigne, haciendo el definitivo 4-2.

CLAVES DEL PARTIDO:

- Conexión Morata-Isco. De ellos nació el primer gol y también las mejores ocasiones de España, Morata tira muy bien los desmarques e Isco los ve de maravilla.

ORO: Thiago: Perfectos sus primeros 45 minutos. Jugando cerca del área ha hecho lo que ha querido, recital de pases, controles y regates a los que ha unido 3 goles: de cabeza, con la izquierda y con la derecha.

PLATA: Montoya/Alberto Moreno. Perfecto en ataque el primero, perfecto en defensa el otro. Montoya ha sido el dueño de la banda derecha sobre todo en la segunda parte, por ahí ha creado mucho peligro y ha provocado el penalti del 4º gol. El sevillista en cambio no se ha prodigado tanto en ataque, pero es de destacar un impecable trabajo defensivo durante la primer parte.

BRONCE: Morata: peligro constante, movilidad, asistencia, trabajo, asociación… el canterano madridista ha caído a banda, tirado desmarques en profundidad, en apoyo a los medias puntas, se ha asociado y ha sido un quebradero continuo de cabeza para los defensas italianos que no han sabido cómo pararlo. Partido muy completo del madridista al que solo le ha faltado el gol.

LA SORPRESA: 

- La debilidad de la defensa Italiana. Venia de encajar solo un gol y de penalti en todo el torneo y de ser bastante sólida. En esta final se llevaron 4 goles y pudo ser alguno más. Retratada en el gol de Thiago.

LA DEDEPCIÓN: 

- Verratti. Es el líder de esta Italia sub 21, el que lleva el ritmo y controla los partidos, pero en la final se vio siempre desbordado, nunca se hizo con el balón y le falto personalidad y carácter para intentar tirar un poco del carro ante la avalancha de juego de España. Gran europeo el suyo, pero se esperaba un poco más en la final.

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Artículo por @peinado90