sábado, 10 de noviembre de 2012

Hay muchos jugadores que apuntan maneras. En algunos casos llegan a cracks, cumpliendo lo que se esperaba de ellos e incluso superando las expectativas.

En otros casos, el jugador, por lesiones, presión mediática o simplemente, falta de calidad futbolística, se queda a medio camino y pasa a la lista de “eternas promesas” o “catacracks” en la que ningún futbolista quiere ver su nombre.

En este artículo repasaremos la historia de alguno de estos casos recientes.


Gourcuff (26)
Gourcuff: ahora con 26 años, hace apenas cuatro era considerado, nada menos, como el heredero de Zidane. Mediocentro creativo, se le vinculó con importantes clubs de Europa. Terminó firmando por el Milan procedente del Rennes. Después de unos primeros partidos prometedores, el galo empezó a decaer. Y decaer, y decaer… Tras dos temporadas donde nunca terminó de asentarse, fue cedido al Burdeos. Tras una primera temporada notable, donde recuperó parte del nombre perdido, el equipo francés ejerció la opción de compra. Tras otros dos años a buen nivel fue fichado por el Olympique de Lyon. Ese fue el verdadero comienzo de su declive: dos años más tarde, esta fuera de la selección gala (tuvo problemas con pesos pesados del vestuario francés) y el presidente de su equipo ha afirmado que el jugador está en venta. Es el segundo jugador mejor pagado de la Ligue 1 (solo por detrás de Ibra). Tanto el Olympique de Lyon como el combinado francés han terminado renegando del “Petit Zidane” y perdiendo la fe en el que fuese elegido mejor jugador de la liga francesa.

Pedro León (25)
Pedro León: después del excelente rendimiento que mostró con el Getafe, el Madrid se hace con sus servicios. En la primera temporada de Mourinho, el extremo firma una fantástica pretemporada, siendo comparado con todo un icono blanco como Michel. En la temporada firma una gran actuación contra el AC. Milan en Champions. El principio del fin: problemas con Mourinho, no entra en las convocatorias, entrenamientos en solitario, pulso al club y al entrenador para seguir en el equipo… Finalmente vuelve al Getafe. Marcado por las lesiones, la temporada pasada (al margen de un golazo a principios de Liga) fue mala para él. Actualmente sigue en el Getafe, donde está cuajando una buena temporada. Quizá nos equivoquemos, pero parece el caso típico de “jugador grande de equipo pequeño”.

Woodgate (32)
Woodgate: procedente del Newcastle, el Madrid se hace con sus servicios por 20 millones de Euros. Llegó lesionado, pero con el cartel de mejor central de Inglaterra. Ya había jugado con la Selección inglesa.
Las lesiones de sucedieron y, las contadas veces que estaba en condiciones para jugar, el británico firmaba actuaciones bochornosas (goles en propia, expulsiones, errores atrás…) Dos temporadas y solo 9 partidos después ficha por el Middlesbrough. Dos temporadas en las que juega 46 partidos, mostrando un buen nivel. Posteriormente el Tottenham lo ficha. Llega a ser un hombre importante en el vestuario, siendo vicecapitán, pero poco a poco va cayendo en el ostracismo. Tras cuatro años recala en el Stoke y vuelta al Middlesbrough otra vez (donde juega actualmente). Carrera con altibajos, un buen central eternamente castigado por las lesiones que nunca llegó a confirmarse como el jefe de la zaga de un equipo grande.

Robinho (28)
Robinho: de sobra conocido el culebrón de mercado de fichajes que desembocó con su llegada al Real Madrid. Con etiquetas del nivel de “futuro mejor jugador del mundo” o “sucesor de Pelé”. Firmó buenos partidos con la elástica blanca y poco a poco perdió protagonismo. Pese a todo, fue el jugador número 12, el que sacar para revolucionar los partidos atascados con sus bicicletas. No era imprescindible y cuando el Manchester City ofreció 43 millones de euros por él no hubo que pensárselo demasiado. En el City alternó partidos mejores y peores, pero lejos de convertirse en una estrella. Terminó desembocando en ese cementerio de elefantes conocido como AC. Milan. En el conjunto italiano ha alcanzado una cierta regularidad. Por su trayectoria, podemos decir que Robinho se ha consagrado como un jugador de calidad para equipos con nivel Champions. Pero muy lejos no ya de ser el mejor del mundo, si no de ser el mejor en cualquiera de los equipos en los que ha militado (hasta en el Santos el mejor era Diego) Más cerca de ser un suplente de lujo que la estrella de un equipo.

Marcos Alonso (22)
Marcos Alonso: hace pocos años era considerado como la joya de La Fábrica. El futuro lateral izquierdo blanco. Firma por el Bolton. El año pasado el jugador, conduciendo etílico, tiene un accidente de tráfico. Muere una joven de 19 años y un amigo suyo sufre una fractura de clavícula. Actualmente tiene contrato con el Bolton, que juega en la segunda inglesa (Football League Championship). Evidentemente, nunca más se supo del que fuera internacional sub 19 con España.


Del Horno (31)
Del Horno: con a penas 23 años llegó a consagrarse como uno de los mejores laterales izquierdos de Europa. Estrella del Athletic y titular con la Roja. Por problemas económicos el Athletic lo vendió por 13 millones de euros nada menos que al Chelsea de Mourinho. Adiós a sus días de gloria. Nunca llegó a cuajar con los blues. Una grave lesión tampoco ayudó. Tras un par de años, el Valencia acometió su fichaje, por 8 millones de euros. Del Horno recibía 2 millones al año. Fracaso, volvió a lesionarse de gravedad. Se marchó cedido al Athletic. De vuelta a casa, no consiguió arrebatarle la titularidad a Koikili. Vuelve al Valencia. En el mercado invernal de la 2009/2010 llega al Valladolid, donde cosechó un descenso y más lesiones. Después de rescindir su contrato con el Valencia llega al Levante. A penas jugó y el club no le renovó. Actualmente, con 31 años, se encuentra sin equipo. Sin duda alguna las lesiones y la actitud (problemas con salidas nocturnas) acabaron con la prometedora carrera del LI vasco y no llegó a consolidarse en la élite como prometía.

Sergio Araujo (20)
Sergio Araujo: solo tiene 20 años, pero es un caso particular. Hace unos dos o tres años, Araujo era la mayor promesa del fútbol argentino junto con Erik Lamela. ¿Hoy? Con la misma edad, Lamela es una de las estrellas de la Roma, mientras que Araujo fue cedido esta temporada por Boca Juniors al Barça B. Es muy joven y tiene tiempo de sobra para despuntar, pero se esperaba mucho más de él a estas alturas. No aparece en el listado del Golden Boy. Esperemos que sea el típico jugador que apunta maneras de joven y despunta más tarde, y no el de joven que firma tres o cuatro partidos buenos seguidos y es endiosado por la prensa sin ser aún nadie.

Bojan (22)
Bojan: parece mentira que Bojan entre en esta lista, cuando con solo 22 años ya ha debutado con la Roja y militado en Barça, Roma y Milan. ¿La realidad? Bojan fue un futbolista muy precoz. Máximo goleador histórico de las categorías inferiores del Barça. Jugó en el primer equipo pero, a pesar de tener minutos, quizá no fueron los suficientes para que desarrollara su potencial. Posteriormente fue cedido a la Roma, donde ha cuajado una decente temporada (7 goles en 33 partidos, ninguna locura) y ahora milita en el AC Milan. Caso similar al anterior, tiene tiempo para explotar, pero pocos tienen fe en que sea “el Raúl del Barça” que más de uno quiso vender.

Perotti (24)
Perotti: hace unos 3 o 4 años todo el mundo se peleaba por él. Sonó muy fuerte para reforzar a Madrid y Manchester. Uno de los cracks del Sevilla, Del Nido se desmarcó (fiel a su estilo) pidiendo 40 millones de euros. Conforme han pasado los años desde entonces, el jugador se ha ido desvaneciendo. Un calvario con las lesiones, tanto a nivel físico como a nivel psicológico, lo han mermado. Tiene 24 años, si algún día se recupera del todo quizá veamos a aquel habilidoso extremo zurdo que nos deslumbró a todos hace no tanto tiempo.

Drenthe (25)
Drenthe: de sobra conocida su historia, no está de más que la repasemos aquí para echarnos unas risas. Realizó un extraordinario Europeo sub 21 en 2007, siendo nombrado como mejor jugador del torneo. Grandes clubs se interesaron entonces por la estrella emergente del Feyenoord, pero fue el Real Madrid el que se llevó el gato al agua. Una vez en el Madrid, su prometedora carrera da un vuelco: pocos minutos, falla un mano a mano decisivo contra el Barça, resbalones en el campo, centros a la grada, colador en defensa… Una serie de catastróficas desdichas. Posteriormente es cedido al Hércules. Juega a buen nivel pero su forma de ser y estilo de vida no le ayudan a asentarse. El Hércules desciende a final de temporada. Al año siguiente el Madrid o cede al Everton. Muy bien no haría las cosas para encontrarse a día de hoy sin equipo.

El fútbol está lleno de casos similares y seguro que nos estamos dejando varios. Podeis escribir los que considereis que faltan en los comentarios. 

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